Según un artículo del Kölnische Rundchau sobre el reporte de la GfU (Gesellschaft für Unterhaltungselektronik) en el año 2011 se vendieron más tornamesas que reproductores de CD, las cifras son 118,000 unidades contra 87,000. Como equipo separado para integrarse a un sistema.
Como referencia, en 1994 se vendieron 205,000 tornamesas, con "renacimiento" o sin el, como sea, el cambio de siglo le ha tumbado ventas de alrededor de 100,000 unidades al formato análogo. En contraparte en 1994 se vendieron 1.7 millones de reproductores de CD, una abismal caída de ventas de 1.6 millones.
No olvidemos que el reporte menciona que una quinta parte de las personas no usan ya de modo cotidiano algún medio físico para reproducción musical, es decir prefieren reproductores tipo MP3.
El artículo comenta que buenos modelos de tornamesas se consiguen en 350 Euros, mientras que el rango medio ronda los 1000 Euros y los modelos de gama alta inician alrededor de los 2500 Euros.
Sobre este tema un reporte de la revista Stereo comenta que también la GfK coincide en este hecho, más tornamesas se vendieron que reproductores de CD, como equipo separado.
Sin embargo en sistemas compactos conocidos como sistema-componentes o minicomponentes la diferencia es inversa, 24 millones de sistemas de audio incluyen reproductor de CD contra los 14 millones que incluyen tornamesa y de aquí se sabe que el costo promedio de un sistema con tornamesa es de 115 Euros mientras que el costo promedio de aquel que tiene CD como fuente principal de sonnido ronda los 274 Euros. Más aún, de esto se entendería que la gente destina más dinero a un mejor sistema con CD que a uno con tornamesa, marcando claramente que hay una inundación en el mercado de tocadiscos baratos, posiblemente usados principalmente para digitalizar viejos discos más que para usarse como un medio cotidiano.
La gráfica indica porcentaje de importe de ventas.