Un artículo interesante, un cable no da más, simplemente evita perder, atenuación, problemas de acoplo de impedancia, reflexiones, mercadotecnia, efecto placebo, la no diferencia entre cables HDMI y USB sin importar el precio (yo solo señalaría que habría que considerar malla y blindaje como un factor), los límites de la escucha humana y hasta salió a relucir el mismo fenómeno pero con instrumentos musicales. En unos pocos párrafos toca todas las bases sin ser antagonista o promotor.
Dice la psicóloga Emma Kenny, que aparece regularmente en programas de la BBC: "si gastas una suma de dinero en un producto de ese tipo tendrás que justificar personalmente su costo ante tu mismo", yo le respondería a la psicóloga que en mi experiencia prestando cables (Groneberg HiFi Technik) antes de comprarlos para valoración esto que argumenta no existe y no es válido, no hay gasto por justificar.
Al final el autor de modo no controlado se pone a comparar cables ordinarios contra cables de tres precios distintos de Atlas Cable y relata que tanto el modelo de 45 como de 120 Libras le aportaron mejoras audíbles comparándolos uno contra otro, aunque disminuyendo tales beneficios comparativos entre más se elevaba el precio, al punto que al probar el modelo de 850 Libras ya no fue perceptible ninguna mejora contra el modelo previo en la escala de 125 Libras. El autor dice que se sentiría bien con el modelo de 45 Libras o si acaso con el de 120 Libras. Sin ser disculpa pero también hay niveles de resolución en equipos de audio y por bueno que sea el cable no podrá revelar lo que no hay y no está entregando el sistema, sabemos que se necesita lo mejor de lo mejor para que como sistema todo funcione y aporte aunque sea una pizca de calidad y mejor, en ese caso tal vez el autor no estaba escuchando el límite operativo del cable sino el límite resolutivo del sistema de audio de prueba. Aunque es un sistema de 6000 libras lo que presumiblemente garantiza cierto grado de desempeño tampoco es un monto que podamos creer asegura tener el más alto grado. De ahí que pudiéramos decir que el costo del cable que vaya en proporción el costo del sistema no por razones financieras sino hasta operativas por resultados, si es ese el caso, aunque conozco equipos normales que buen provecho sacan de mejores cables, caros en proporción al costo del equipo mismo.
Como siempre y tal vez lamentablemente no hay reglas, la mejor regla es estar claro, enterado, ser paciente, tener un juicio y criterio de valoración y probar que es lo que mejor funciona para nosotros considerando costo y beneficio, olvídese de apariencias, marcas, "slogans", sellos frases, solo valore el sonido, entonces tal vez no sea necesario gastar un peso más muchas veces, tal vez otras sí, eso es decisión de cada quien.
Interesante y bien llevado artículo.
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